El castillo de Peracense es uno de los más bellos y desconocidos castillos aragoneses, situado en la localidad turolense de Peracense y construido, aprovechando las condiciones naturales del terreno, con piedra de rodeno de la zona, es por su original disposición una magnífica muestra de la arquitectura militar bajomedieval. Constituyó un baluarte fundamental en la defensa del reino de Aragón durante la confrontación con Castilla en el siglo XIV.