El 31 de julio de 1944, los ejércitos alemanes estaban casi vencidos en el frente del oeste y en el frente del este, después del desembarco de los aliados en Normandía, y además el 21 de octubre, también los aliados se habían apoderado de Aquisgrán , aunque bien es cierto que aún existían focos de resistencia en Francia y Bélgica. Hitler comentó a sus más allegados que la situación podía revertirse, abriendo una brecha entre ingleses y norteamericanos con una poderosa contraofensiva , probablemente en otoño y con las condiciones atmosféricas a nuestro favor , para evitar la acción de la poderosa aviación aliada.